Julián Martín fue un religioso y lexicógrafo, activo en Filipinas a mediados del siglo XIX. La vida de este autor es un completo enigma, pues solo poseemos de él los datos que figuran en la cabecera de su única obra publicada, el Diccionario hispano-bisaya. Según estos, en torno a 1842, ya ordenado como agustino, fray Julián desempeñaba las labores de párroco en la localidad de Tignuan, al sur de la isla de Panay, en las Bisayas centrales. Se desconoce dónde y cuándo nació, dónde y cuándo murió; así como ningún otro dato sobre su periplo vital.
El trabajo lexicográfico de este autor entronca con la obra de Alonso de Méntrida, O. S. A. (1559-1637). Martín recoge la parte español-bisaya de la edición de 1841 (Imprenta de D. Manuel y de D. Felis Dayot, por Don Tomás Oliva, s. l.) del repertorio de Méntrida y lo amplía con entre 12 000 y 18 000 entradas más, según la fuente, apoyándose también en la 8ª edición del DRAE (1837).
Jaime Peña Arce