El padre Joaquín de Coria fue un religioso, misionero, poeta, catedrático y lingüista español nacido en 1813, Coria (Cáceres) con el nombre de Joaquín Gil y Montes de Santo Domingo en plena Guerra de la Independencia (1808-1814). Hay muy pocos datos sobre su infancia. En 1830 tomó los hábitos franciscanos en Badajoz y un año después arribó a Filipinas, donde permaneció por 35 años: en la Universidad de Santo Tomás se licenció en Teología y Filosofía y después se dedicó a la labor pastoral y misionera tanto en Manila como en localidades de sus proximidades. En 1866 regresó a España como procurador en Cortes por Filipinas, cargo que compaginó con la dirección del Hospicio de San Antonio (Puerto de Santa María, Cádiz). En vísperas de la Revolución de 1868 fundó el Colegio de su congregación en Consuegra (Toledo) y, pocos meses después –tras la marcha al exilio de Isabel II (1830-1904)–, se instaló en Madrid, significándose como partidario del rey Amadeo I de Saboya (1845-1890) y colocándose bajo la protección de Segismundo Moret (1833-1913), entonces ministro de Ultramar, y posteriormente de Hacienda, en el gabinete del general Prim (1814-1870). A instancias del propio Moret, y de su línea reformista respecto a la política colonial, se creó la cátedra de Tagalo en la Universidad Central de Madrid (1871), cuyo primer titular fue –parece que contra su voluntad– nuestro autor, pues él quería regresar a Filipinas. Al poco tiempo (1873) cayó enfermó y murió rápidamente. Recibió sepultura en el Colegio de Consuegra por él fundado.
Su Nueva gramática tagálog teórico-práctica fue compuesta para servir como libro de texto en la Universidad Central de Madrid. Este extenso trabajo, además del estudio gramatical (morfología y sintaxis) y ortográfico, presenta una importante disertación sobre poesía y métrica en lengua tagala, disciplinas de las que este autor era un verdadero apasionado.
Jaime Peña Arce