César Morán Bardón fue un religioso, académico, profesor de secundaria, arqueólogo, etnógrafo y folklorista español, activo durante la primera mitad del siglo XX, y cuyas investigaciones se centraron en los territorios del antiguo Reino de León. Nuestro autor nació en la pequeña aldea de Rosales, dentro del municipio de Riello, en la montaña leonesa, en 1882. El leonés aprendió las primeras letras en su localidad natal y se formó en Humanidades en el pueblo de Vegarienza, dentro de su propio municipio, hasta marchar (en 1899) como novicio al Real Colegio de Agustinos Filipinos de Valladolid. En 1903 había terminado los estudios de Filosofía, y afincado en el monasterio de Nuestra Señora de la Vid, en plena ribera burgalesa, comenzó los de Teología; en 1907, culminada su formación, fue ordenado sacerdote. Morán consagró su vida a la docencia y a la investigación: desempeñó el cargo de profesor de Francés y de Historia en los colegios agustinos de Talavera de la Reina (Toledo) y de Salamanca, donde ejerció su magisterio en el afamado Colegio de Calatrava. En 1921 fue nombrado académico correspondiente de la Real Academia de la Historia. Desde 1922 dirigió diversas excavaciones arqueológicas en el cerro del Berrueco, justo en el límite entre las provincias de Ávila y Salamanca. La Guerra Civil española (1936-1939) lo sorprendió en tierras salmantinas, por lo que –ya que estas se sumaron rápidamente a la sublevación franquista– nuestro autor no fue molestado ni sufrió ningún tipo de contratiempo. En los años 40 dirigió otras excavaciones en el Protectorado español en Marruecos. A mediados de la década de 1940, en plena posguerra, fue trasladado a un centro agustino de Madrid, donde trabajó hasta su jubilación en 1948. Falleció en Madrid, en 1951, a los 69 años de edad.
La labor erudita de este autor, en campos muy variados, fue tremendamente prolífica. Sin embargo, a los estudios filológicos, concretamente a los lexicográficos, solo dedicó una obra, El vocabulario del Concejo de la Lomba en las Montañas de León, centrado en la descripción del léxico de su área natal, y publicado en tres cuadernos (CXXIX, págs. 155-168, CXXX, págs. 313-330, y CXXXI, págs. 439-456) del nº XXX del Boletín de la Real Academia Española, antes de ser unificado en forma de separata. Este pequeño repertorio, que consta de algo más de 1100 entradas, incluye en cada artículo una caracterización gramatical de la voz (que, en el caso de los sustantivos, queda reducida a la identificación de su género y, si procede, de su número; y en el de los verbos, a la reseña de su carácter transitivo o intransitivo), seguida por una definición, ejemplos de uso y comparaciones con otras soluciones asturleonesas; en el caso de los verbos, se suele incluir también un ejemplo de la conjugación. Este diccionario está encabezado por unas sucintas notas sobre algunas particularidades fonéticas y morfosintácticas del dialecto analizado.