Clemente de Jesús Munguía Núñez fue un religioso, obispo y lingüista mexicano, de origen novohispano, activo durante los años mediales del siglo XIX. Nació en la localidad de Los Reyes de Salgado (noreste del estado de Michoacán), en 1810, en el seno de una modesta familia de comerciantes. Tras aprender las primeras letras en su pueblo natal, fue enviado a la ciudad de Zamora (hoy, Zamora de Hidalgo), donde continuó su formación. Durante los primeros años de su vida, convivió con un país en constante trasformación que, emancipado de la Corona española, daba los primeros pasos para constituirse en una república independiente. En 1830, el joven Clemente se instaló a Valladolid (hoy, Morelia), la principal ciudad de la zona y capital del estado; allí cursó el bachillerato, se formó como abogado y comenzó su desempeño profesional. Sin embargo, en 1841, ingresó en el seminario de aquella urbe y, mientras se formaba como sacerdote, dio clases de Derecho civil y canónico; con el tiempo, alcanzó el rectorado de esa institución y empezó a enseñar lengua castellana y oratoria latina, materias en las que ya había fijado su interés durante su adolescencia. En 1851 se convirtió en obispo de la diócesis de Michoacán gracias al apoyo de los políticos conservadores, que ostentaban el poder en todas las estructuras del país bajo el gobierno del general Antonio López de Santa Anna (1794-1876, presidente de México entre 1833 y 1835, 1839 y 1844, y en 1847). En 1861 y debido a su oposición a las leyes de Reforma, promulgadas por el liberal Benito Juárez (1806-1872, presidente de México entre 1858 y 1872), fue expulsado de México y encontró refugio en Roma. Durante su destierro en la ciudad papal, su sede fue elevada a arzobispado, por lo que desde 1863 quedó convertido en el primer arzobispo de Morelia. Nuestro michoacano, convertido en una de las principales figuras del conservadurismo mexicano de la época, regresó a su país natal durante el Segundo Imperio Mexicano (1863-1867); sin embargo, tras la derrota de Maximiliano de Habsburgo (1832-1867, emperador de México entre 1864 y 1867) volvió a trasladarse a Roma. Clemente de Jesús Munguía falleció en 1868 en la aún, y por pocos años, capital de los Estados Pontificios, cuando contaba con 58 años de edad. En 1897 sus restos fueron exhumados y trasladados a Morelia, en cuya catedral reposan en la actualidad.
El trabajo filológico de Munguía está íntimamente ligado a su labor pedagógica en el seminario de Morelia. En primer lugar, llevó a las prensas unas Lecciones prácticas de la lengua castellana, en las que recogió la doctrina gramatical de la Academia Española y la ilustró con fragmentos de los príncipes literatos de nuestra lengua. Su segunda obra, Gramática general o aplicación al análisis de las lenguas, es más teórica, y está basada en una concepción más filosófica que lingüística. Con el tercero de sus textos, Disertación sobre el estudio de la lengua castellana, retomó el tono didáctico. De esta tercera obra solo se conoce la edición de 1852, aunque se presupone que existió una previa.