No son demasiado abundantes los datos que poseemos de Raimundo Sanz, quien nació a principios del s. XVIII en Hecho (Huesca). Estudió en la Universidad de Huesca Humanidades y Filosofía, aunque adquirió notables conocimientos matemáticos. Pronto ingresó en el regimiento Real de Artillería. Su dominio de idiomas (latín, francés e italiano) le permitió adentrarse en otros saberes, como la pirotecnia, minas, fortificación, arquitectura militar, táctica, etc., de manera que su formación como oficial de artillería fue sólida, y durante 16 años ejerció como minador. En 1848 era capitán del cuerpo de minadores del primer batallón de artillería, y subió en la escala profesional hasta ser Mariscal de Campo de los ejércitos reales. Por sus méritos fue nombrado caballero de Santiago. En 1781 vivía en Cádiz. Murió en 1794.
Debido a su preocupación por la enseñanza militar, pues se carecía de tratados españoles, tradujo el Dictionnaire militaire ou recueil alphabétique de tous les termes propres à l’art de la guerre [...] de François-Alexandre Aubert de La Chesnaye Des Bois (1699-1783), muy poco tiempo después de haber sido publicado (Gissey y Bordelet, París, 1742). El número de entradas del original francés se redujo en la versión española, pues Sanz no realizó una traducción literal, sino más bien una adaptación en la que quedó fuera toda referencia a la realidad francesa, además de añadir aquellas entradas que consideraba conveniente. El orden alfabético no está logrado pues nuestro militar iba traduciendo por orden alfabético, colocando las palabras por el orden en que aparecían en francés si no habían de cambiar de letra, en cuyo caso se ponía al final de las ya traducidas si era en una secuencia anterior, y al principio si todavía no había llegado a la nueva letra. La obra tuvo una nueva edición en 1794 (Gerónimo Ortega y Herederos de Ibarra, Madrid).