Amato Lusitano, cuyo nombre original era João Rodrigues de Castelo Branco, fue un médico portugués, como tantos otros médicos de la época de origen judío, tal vez el más conocido de todos los renegados según Menéndez Pelayo. Nació en Castelo Branco (en la actual Beira Interior Sul, Portugal), en 1511, y pasó su infancia en Portugal. Después estudió en la Universidad de Salamanca. Allí conoció a otro médico insigne, Andrés Laguna (¿1511?-1559). Sabía latín, griego, hebreo y árabe, además de español y portugués, lenguas a las que añadiría con el paso del tiempo conocimientos de italiano, francés y alemán. En 1529, ya médico, regresó a Portugal, a Lisboa, que tuvo que abandonar al poco tiempo al ser expulsada su familia por la Inquisición, motivo que le llevó a cambiar su nombre (latinizando el apellido de sus familiares Javiv, cuyo significado es 'amigo', a lo que añadió el gentilicio Lusitanus 'portugués') y a viajar por diversos países de Europa. Entre 1534 y 1541 residió en Amberes, donde había una notable colonia de judíos portugueses. De allí debió pasar a Ferrara, donde enseñó en la Universidad, ciudad que dejó en 1547 para pasar a Ancona, primero, y después a Ragusa (estuvo en la ciudad hasta 1558), desde donde era llamado para cuidar a insignes enfermos, entre ellos el papa Julio III (1487-1555; papa en 1550). De Ragusa marchó a Salónica, donde había otra importante comunidad judía. Allí murió en 1568, como consecuencia de la epidemia de peste que azotó la ciudad.
Amato Lusitano Publicó diversas obras de tema médico, habiendo mantenido una polémica con el médico italiano Pietro Andrea Mattioli (1501-1578). A nosotros nos interesa por haber sido autor de una versión comentada del Dioscórides, que fue impresa varias veces. En ella, tras los encabezamientos de los remedios de que trata, pone los equivalentes en varias lenguas, entre ellas el español, aunque no en todos los casos, cuyo interés para la historia de nuestro léxico resulta evidente.