Vida
Santiago Diego-Madrazo nació en Salamanca en el año 1816. En 1839, obtuvo el grado de licenciado en Leyes, y, poco después, se doctoró por la Universidad de Salamanca. El 8 de junio de 1842, se convirtió en profesor de Historia, Geografía y Gramática Castellana en la Escuela Normal. En 1841 inició su carrera política desempeñando diferentes cargos a lo largo de su vida: consejero de Estado, senador del reino, vicepresidente del Senado y ministro de Fomento.
Fue nombrado para ocupar la cátedra de Economía Política y Derecho Político y Administrativo en la Universidad de Salamanca. A pesar de que la Dirección General de Estudios había ordenado a todas las universidades en 1843 publicar el plan de estudios y el libro de referencia para los estudiantes, Madrazo optó por no seleccionar ningún libro de texto, argumentando que ninguno se ajustaba a sus ideas. También fue nombrado decano de la Facultad de Filosofía y Letras, y, posteriormente, de la Facultad de Derecho de la misma universidad. Durante todos estos años, su desempeño como educador le hizo ganar renombre entre sus estudiantes debido a su profundo conocimiento y enfoque pedagógico efectivo. Fue condecorado con la Gran Cruz de la Orden de Isabel la Católica; y en 1872, recibió la Gran Cruz de la Orden Civil de María Victoria. Diego-Madrazo era conocido por su habilidad como orador y se le escuchó en el Ateneo de Madrid, la Sociedad Libre de Economía Política, el Congreso de Jurisconsultos y la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas. Falleció en su ciudad natal en el año 1890.
Su obra Principios de gramática general (1841) fue recomendada por la Dirección General de Estudios para la enseñanza de la Gramática General en España. Para él, la gramática general tiene por objeto examinar la naturaleza del lenguaje, que no es más que la expresión del pensamiento por medio de la palabra. Afirmaba que esta no es un arte, sino una ciencia que analiza las voces, las divide en clases y deduce del examen de nuestro entendimiento la manera de coordinarlas. Esta obra está dividida en cuatro grandes partes. La primera se titula «De las palabras» y está compuesta por cinco capítulos. Aquí, el autor trata las distintas clases de palabras y categorías que existen en la lengua española. La segunda parte, «De la sintaxis», se divide en dos capítulos. El primero hace referencia a la ubicación de las diversas clases de palabras dentro de una oración y a las relaciones existentes entre las categorías; el segundo, trata sobre las partes de la oración. En la tercera parte, «De la prosodia», se explican conceptos de fonética (fonemas, sonidos), sobre todo, articulatoria (punto y modo de articulación para pronunciar una voz). También aparecen unos breves apuntes sobre entonación. Por último, la cuarta parte, titulada «De la ortografía», que ocupa las últimas páginas del manual, se habla, de manera sucinta, de los signos y los distintos tipos de escritura.