Vida
Aunque nacido en Barcelona, Ricardo León y Román vive desde pronto en Málaga, y es en esta ciudad donde a finales de siglo publica en la prensa local sus primeros poemas de corte modernista, entre los cuales destacan Las Quimeras de la vida. Fantasía Oriental (1898) y, poco después, el poemario La lira de bronce (1901); ese mismo año su trabajo en el Banco de España lo lleva a Santander, donde continúa colaborando con la prensa, especialmente con El Cantábrico. Tras otra breve estancia en Málaga, llega a Madrid en 1910, y es aquí donde León y Román se incorpora a los círculos literarios más conservadores y se consagra como autor de referencia para este grupo ideológico: asentado y reconocido en la capital, el escritor publica numerosas obras en prosa y verso (Alivio de caminantes, 1912; La escuela de los sofistas y El amor de los amores, 1910; Los centauros, 1912; Humos de Rey, 1923; Jauja, 1928) con gran éxito de público, y es también elegido académico de número de la Real Academia Española en 1912, a la que ingresa en 1915 con el discurso La lengua clásica y el espíritu moderno. Como es de esperar, León y Román no será ajeno a la conflictiva situación política de España durante las primeras décadas del siglo XX: claramente significado políticamente, publica obras combativas durante la Segunda República (Bajo el yugo de los bárbaros, 1932; Roja y gualda, 1934) y sufre persecuciones y penalidades durante la Guerra Civil; pocos años después del final de la contienda, en 1941, muere en Torrelodones (Madrid) tras publicar su última obra, Cristo en los infiernos (1939).
José Luis Ramírez Luengo