Fray Agustín de la Magdalena fue un religioso, misionero y lingüista español del s. XVII, de cuya vida se conservan muy pocos datos. Parece que nació en Puebla de Lillo, una pequeña localidad del noroeste montañoso de la provincia de León (España) en el decenio de 1640. Profesó como religioso franciscano descalzo –erróneamente ha sido considerado agustino recoleto– en algún convento castellano antes de trasladarse a Filipinas en 1665; desde 1667 y hasta 1672 ejerció su ministerio en diversas localidades de la provincia de Tabayas (actuales provincias de Quezón y Laguna, dentro de la región de Calabrazón), al sureste de la isla de Luzón. En 1672 es designado procurador de la provincia y, un año después, se radicó en la parroquia de Sampaloc, también en la misma zona del Archipiélago. En 1676 viajó a la Nueva España y se instaló en la villa de San Agustín de las Cuevas, al sur de la Ciudad de México y hoy absorbida por esta; de México viajó a Roma, donde participó en un capítulo de su orden. Finalmente regresó a Filipinas en 1684 instalándose en Santa Cruz, actual capital de la provincia de Laguna, ciudad en la que falleció en 1689.
Parece que nuestro autor aprovechó su estancia en México para editar su Arte de la lengua tagala, sacado de diversos artes, que, como indica el título, es una refundición y actualización de tratados anteriores sobre la lengua tagala en la que se presta gran atención a la pronunciación. El objetivo de esta obra era facilitar la evangelización y el adoctrinamiento de la población indígena, tarea a la que el padre Agustín consagró su vida.
Jaime Peña Arce