El escritor Pablo de Zamarripa y Uraga nació en Laredo (Cantabria) en 1877, pero pasó su infancia en la localidad vizcaína de Sondica, lugar en el que inició sus estudios. Tras continuar con su formación, primero en Vitoria-Gasteiz y después en Salamanca, en 1906 fue ordenado sacerdote y ejerció como tal en varios lugares de la provincia vizcaína, como Ocharán, Gatica, Bermeo y Sondica.
Entre los años 1897 y 1899 fue director de la sección «Izkirimiriak» en la revista Euzkalzale, fundada por el vascólogo Resurrección María de Azkue (1864-1951), pero también fue colaborador en otras publicaciones, como Euskal Erria, la Revista Internacional de Estudios Vascos, el Boletín de la Real Sociedad Bascongada de Amigos del País o Euskalerriaren Alde. A partir de 1935 trabajó como redactor de la sección vasca del diario La Gaceta del Norte.
Este sacerdote vizcaíno es autor de un libro de poemas con el título Gora begira. Olerki goi-usañekoak (Bilbao, 1927) y de textos en prosa: Zaparradak eta… (Bilbao, 1926), Anayak gara (Bermeo, 1929), Kili-kili (Barre Ipuiñak)… Bigarren liburu-barrezalea (Bermeo, 1930), Firi-firi. Ipuin ta naste (Bermeo, 1935). En estas obras, que reúnen muchos de los textos publicados en las revistas y periódicos en los que colaboró, se incluyen principalmente narraciones breves, de tono humorístico.
Zamarripa no solo se dedicó a la composición literaria, sino que escribió varias obras sobre la lengua vasca. En 1909 publicó una gramática del dialecto vizcaíno, con el título El Bascuenze facilitado. Gramática del euskera bizcaíno y en 1913 un Manual del vascófilo, en el que se recogen ciertas particularidades de dicho dialecto. Escribió además una obra con las Conjugaciones guipuzcoanas (1929), y en 1915 publicó una Gramática vascongada, con vocabulario vizcaíno-castellano y castellano-vizcaíno. De esta obra apareció en 1928 una nueva edición reformada, con el título Gramática vasca (Imprenta y librería de Gaubeka, Bermeo). Dos años más tarde, en 1930, se publicó con el mismo sello el Vocabulario vasco-castellano, como suplemento a la mencionada Gramática, en la que sí se había incluido el repertorio castellano-vasco.
Nerea Fernández de Gobeo