Carlos Federico Barbará fue un militar, periodista y filólogo argentino. Nació en Buenos Aires en 1828 en el seno de una familia formada por una criolla porteña y por un militar italiano –con quien compartía nombre– que luchó contra los británicos durante las Invasiones Inglesas del Río de la Plata (1806-1807) y contra la Corona española durante la Guerra de Independencia Argentina (1810-1820). Nuestro autor, siguiendo el modelo de su progenitor, eligió la carrera militar. Dentro de la turbulenta historia argentina de mediados del siglo XIX (1820-1862), previa la estabilización de la República –y marcada por la atomización del poder en manos de caudillos regionales, el enfrentamiento de la provincia de Buenos Aires (federales) con las del interior (unitarios), la desunión interna dentro de cada provincia, las injerencias de naciones vecinas y la incipiente conquista del desierto patagónico–, Federico Barbará comenzó luchando (1851) en las filas del controvertido gobernador de Buenos Aires y presidente de la Confederación Argentina, Juan Manuel Rosas (1793-1877), justo en el momento de su caída: la batalla de Caseros (1852), donde fue traicionado y vencido por su lugarteniente Justo José de Urquiza (1801-1870). Caído Rosas, Urquiza ocupó el gobierno provincial y se propuso avanzar en la organización constitucional del país; el 11 de septiembre de 1852 los bonaerenses, y entre ellos Barbará, se sublevaron contra su gobernador, proclamaron la independencia y fundaron el Estado de Buenos Aires (1852-1861). Desde ese momento, Barbará continuó sirviendo en el ejército porteño en varias campañas de la conquista del desierto patagónico y en las guerras que unieron a Argentina (Buenos Aires incluido), Uruguay y Brasil contra Paraguay. En 1861 el Estado de Buenos Aires fue disuelto y se reincorporó como provincia a la República Argentina, así Barbará se incorporó al ejército nacional actuando contra cualquier movimiento desestabilizador: Rebelión Jordanista (1878) y Revolución del Parque (1890). Simultáneamente a sus labores en la milicia, su interés por el periodismo lo llevó a la fundación del periódico El Republicano, desde el que defendió unos principios humanísticos basados en la democracia y la educación del pueblo. Federico Barbará murió, con grado de teniente coronel, en San Fernando, localidad del norte de la provincia de Buenos Aires cercana al Delta.
La labor filológica de este autor es autodidacta y se basa en el contacto que tuvo con los pueblos de La Pampa durante las campañas militares en las que participó (1854 y 1867). Así, con el precedente de los trabajos de Thomas Falkner (1702-1784) compuso su Manual o vocabulario de la lengua pampa, texto que mejoraba y ampliaba el aspecto lingüístico respecto a un trabajo anterior, Usos y costumbres de los indios pampas.
Jaime Peña Arce