Bernardo María Carrasco y Cáceres fue un religioso cisterciense y helenista español, activo durante la primera mitad del siglo XIX. La vida de este autor es, prácticamente, un completo enigma. Se desconoce cuándo nació y murió, al igual que la mayoría de datos que mediaron entre estos dos acontecimientos. Se formó en el Colegio de San Bernardo, en la Universidad de Alcalá, donde, desde 1819 y hasta 1836, fue catedrático de Griego. Entre los años de 1823 y 1826, simultaneó sus ocupaciones académicas con la dirección del monasterio de Santa María de Aciveiro (Forcarey, Pontevedra), habitado por su congregación. En 1836, con el traslado de la Universidad alcalaína a Madrid, ocupó una cátedra en la Universidad Central, desde donde abogó por la promoción de los estudios helénicos en España. Durante los años finales de su vida, trabajó con ahínco en la redacción de un malogrado diccionario griego-español y fue nombrado, en una fecha por determinar, miembro de número de la Real Academia de Medicina. Las únicas informaciones confirmadas sobre los últimos años de su vida son que, en 1849, seguía ocupando su plaza de catedrático y que, en una fecha posterior a esa, murió en la ciudad de Madrid.
La Biblioteca Nacional de España atesora un manuscrito en dos tomos, redactado por este autor, que recoge gran parte de sus lecciones impartidas en las aulas universitarias del Madrid decimonónico.
Jaime Peña Arce