Pedro Bartolomé Casal fue un religioso y humanista español del siglo XIX, de talante conservador y vinculado a la Universidad de Santiago de Compostela. Nació en la pequeña parroquia de San Jorge de Sacos, situada en el municipio pontevedrés de Cercedo-Cotobad, en 1816, en el seno de una familia cuya calidad nos es desconocida. En 1832, con 16 años, ingresó en el convento de San Francisco del Valle de Dios, en la capital gallega, y allí tomó el hábito franciscano; sin embargo, en 1836, tras la desamortización de Mendizábal, tuvo que abandonarlo. La lucha por la reapertura de ese monasterio consumió gran parte de sus energías; en 1862, finalmente, volvió a abrir sus puertas. Entre 1837 y 1859, fecha en la que empezó a cursar la carrera de Teología en la Universidad Central de Madrid, estudios que terminó en 1861, nuestro autor fue profesor de Latín y Castellano en el instituto adjunto a la Universidad compostelana. Su formación se completó con un doctorado en Teología por la Universidad Central, donde también comenzó Derecho; además, entre 1859 y 1863, estudió Filosofía y Letras en Santiago. En 1873 accedió a una cátedra universitaria, la de Griego, en la academia santiaguesa, puesto que desempeño hasta su muerte, acaecida en 1886.
El trabajo filológico del padre Casal fue muy abundante, aunque más el literario que el lingüístico. De este último grupo, conservamos una serie de pequeños programas de asignaturas (como Latín, Castellano o Humanidades), impartidas en el instituto agregado a la Universidad de Santiago a lo largo de diferentes cursos de la década de 1850. No obstante, dentro de la producción del gallego, el texto más relevante es su Gramática latina, de 1859, un manual eminentemente didáctico. Esta obra aparece dividida en tres grandes apartados: etimología (por morfología), sintaxis y prosodia; además, cuenta con un apéndice sobre los grandes autores de las letras latinas.
Jaime Peña Arce